Cómo gestionar la creatinina elevada en personas mayores

¿Qué es la creatinina y por qué es importante?

La creatinina es un producto de desecho de la creatina, una sustancia que los músculos utilizan para producir energía. Los riñones filtran la creatinina de la sangre y la eliminan del cuerpo a través de la orina. Cuando los riñones no funcionan correctamente, los niveles de creatinina en sangre aumentan, lo que puede indicar daño o enfermedad renal.

Causas de la creatinina elevada en personas mayores

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Enfermedad Renal Crónica (ERC):

La ERC es una causa común de creatinina elevada en personas mayores. Los riñones se deterioran gradualmente, lo que afecta su capacidad para filtrar la sangre.

Deshidratación:

La falta de suficiente líquido en el cuerpo puede concentrar la creatinina en la sangre. Es importante mantener una hidratación adecuada, especialmente en personas mayores.

Infecciones y enfermedades:

Infecciones del tracto urinario y otras enfermedades pueden afectar el funcionamiento renal y aumentar los niveles de creatinina.

Medicamentos:

Algunos medicamentos, como los antibióticos y los antiinflamatorios no esteroides (AINE), pueden dañar los riñones y elevar los niveles de creatinina.

Síntomas de creatinina elevada

Fatiga y debilidad: Los niveles elevados de creatinina pueden causar una sensación general de cansancio y debilidad.
Hinchazón: La retención de líquidos puede provocar hinchazón en las extremidades y alrededor de los ojos.
Orina espumosa o oscura: Cambios en la orina, como espuma o color oscuro, pueden indicar problemas renales.
Náuseas y vómitos: La acumulación de desechos en el cuerpo puede causar malestar gastrointestinal.

Estrategias para gestionar la creatinina elevada

Mantener una hidratación adecuada:

Beber suficiente agua es crucial para ayudar a los riñones a eliminar la creatinina del cuerpo. Se recomienda a las personas mayores consumir al menos 8 vasos de agua al día, a menos que el médico indique lo contrario.

Seguir una dieta baja en proteínas:

Una dieta baja en proteínas puede reducir la producción de creatinina. Las proteínas deben provenir de fuentes de alta calidad y en cantidades moderadas.

Controlar la presión arterial:

La hipertensión puede dañar los riñones. Mantener la presión arterial bajo control es vital para la salud renal. Esto puede incluir la toma de medicamentos, una dieta baja en sal y ejercicio regular.

Monitorear y ajustar medicamentos:

Revisar los medicamentos con el médico para asegurarse de que no están contribuyendo a los niveles elevados de creatinina. Se pueden necesitar ajustes en las dosis o cambios en la medicación.

Adoptar hábitos de vida saludables:

Dejar de fumar y limitar el consumo de alcohol son pasos importantes para mejorar la salud renal. Además, el ejercicio regular puede ayudar a mantener un peso saludable y mejorar la función renal.

Consultar regularmente al nefrólogo:

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Las personas mayores con niveles elevados de creatinina deben consultar regularmente a un nefrólogo para monitorear la función renal y recibir tratamiento adecuado.

Suplementos y remedios naturales:

Algunos suplementos, como los ácidos grasos omega-3 y ciertos extractos de hierbas, pueden apoyar la salud renal. Es crucial hablar con un médico antes de comenzar cualquier suplemento.

Gestionar la creatinina elevada en personas mayores requiere un enfoque multifacético que incluye la hidratación adecuada, una dieta balanceada, control de la presión arterial y hábitos de vida saludables. Consultar regularmente con profesionales de la salud y hacer ajustes necesarios en los medicamentos también son pasos cruciales. Con estas estrategias, es posible mantener una función renal óptima y mejorar la calidad de vida de las personas mayores.

Para obtener más información y recursos sobre cómo gestionar la creatinina elevada, consulta la páginas web de Sociedad Española de Nefrología.

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